En la actualidad, la diversidad funcional de las personas es concebida como algo que debe cambiarse, repararse o curarse de lo contrario esas personas, con diversidad funcional, son etiquetadas con diferentes diagnósticos que las limitan en obtener oportunidades, libertades y recibir apoyos que les lleven a desarrollar sus habilidades. La Comisión de Derechos Humanos garantiza el derecho a la vida, a la supervivencia y al desarrollo de todos los niños, niñas y adolescentes. Sin embargo, las personas que nos llamamos a nosotras mismas: "normales", nos colocamos en el lugar del "modelo ideal" y observamos a los grupos vulnerables como cuasi-personas u objetos que por no contar con las mismas habilidades neurobiológicas, educativas y/o socioconómicas que los "neurotípicos", no cuentan con garantías en el cumplimiento de sus derechos tan solo por el hecho de ser humanos. Las personas somos seres diversos que a partir del momento de ser conc